Papeles del Psicólogo es una revista científico-profesional, cuyo objetivo es publicar revisiones, meta-análisis, soluciones, descubrimientos, guías, experiencias y métodos de utilidad para abordar problemas y cuestiones que surgen en la práctica profesional de cualquier área de la Psicología. Se ofrece también como foro para contrastar opiniones y fomentar el debate sobre enfoques o cuestiones que suscitan controversia.
Papeles del Psicólogo, 1981. Vol. (1).
Colegio Oficial de Psicólogos
Antes de la constitución autónoma del Colegio Oficial de Psicólogos y durante los años de funcionamiento como Sección de Psicólogos del Colegio Oficial de Doctores y Licenciados de Filosofía y Letras, las actividades desarrolladas por los profesionales que trabajábamos en dicha Sección se articularon en las clásicas comisiones de Psicología Clínica, Escolar e Industrial.
En 1975, coincidiendo con importantes luchas obreras y del movimiento ciudadano se formó una comisión, llamada Psicología de barrios cuya corta existencia dio como fruto una ponencia leída en el II Simposium de Psicología celebrado en Valladolid en 1976. Esta ponencia planteaba, entre otras cosas, la necesidad de cuestionarse las académicas divisiones de la Psicología, sobre todo cuando el campo de trabajo pasaba de ser lo clínico, lo escolar y la orientación profesional a lo social, lo comunitario. Al cabo de 6 años volvemos a retomar este viejo proyecto cuya realización, al menos en parte, se va desarrollando actualmente a través de los S.M. en funcionamiento.
En el principio era la Comisión de barrios
Nos parece interesante reproducir algunos párrafos que dan idea del planteamiento que aquel grupo de Psicólogos tenía en 1975 del trabajo en barrios: "... buscamos un replanteamiento de las tres divisiones clásicas de la práctica psicológica: industrial, clínica y pedagógica: un replanteamiento de la Psicología clínica, de forma que se tenga en cuenta el medio sociocultural en el que se desenvuelven las personas, propugnando una psicología preventiva, que atienda tanto a las necesidades individuales como colectivas. El tratamiento de estos problemas implica que se posibilite y se desarrolle una psicología preventiva, de defensa del ciudadano, que evite situaciones patógenas eliminando o disminuyendo las causas estructurales de los trastornos psicológicos".
Aquel incipiente interés de los psicólogos en "iniciar un trabajo profesional en las barriadas populares... dando prioridad a los problemas colectivos sobre los individuales... apoyando el movimiento reivindicativo de las asociaciones de barrio mediante el estudio de nuevos aspectos de la problemática urbana que puedan ser asumidos por la población y mediante la información y el asesoramiento sobre problemas y necesidades sentidas y evidenciadas por la misma y que caen dentro de nuestra competencia", repetimos, aquel interés de los psicólogos, expresado a través de aquella Comisión de Psicología en los barrios, chocó inmediatamente con la casi imposibilidad de desarrollar aquel trabajo desde un lugar institucional.
Los Ayuntamientos dominados todavía por elementos y estructuras franquistas no ofrecían ninguna posibilidad de trabajo a los psicólogos y otro tipo de instituciones públicas (S. Social, Sanidad, H. Psiquiátricos, etc.) todavía menos. La única posibilidad de llevar a la práctica algún tipo de iniciativa en la comunidad era a través de las organizaciones populares (Asociaciones de Vecinos, de Amas de Casa, de Padres de Alumnos, etc.) y éstas por su situación de oposición al poder central y local estaban totalmente marginadas y sus recursos materiales eran escasísimos.
El trabajo de los psicólogos en este período se reducía pues a la participación en seminarios junto a otros profesionales (Seminario Interprofesional sobre problemática de la Estructura Urbana de Madrid) y al intento más o menos voluntarista de inserción de algunos grupos de psicólogos en algún barrio (Equipo Centro de Hortaleza, Cehime de Saconia, ...).
La Sección de Psicología mantuvo su lucha por la transformación en Colegio Oficial, por la creación de puestos de trabajo, etc., y la comisión de Psicología en barrios desapareció.
Desde 1976 hasta 1980, a pesar de múltiples actividades y logros de la Sección de Psicólogos, no se vuelve a trabajar específicamente sobre el tema del Psicólogo en la comunidad. Sólo a partir de la constitución del Colegio Oficial de Psicólogos se iniciará una nueva etapa.
De las comisiones supervivientes del período anterior es la comisión de Psicología Clínica la que, entre sus actividades, comienza a trabajar sobre la Psicología en los barrios.
En Diciembre de 1980, ya con alguna experiencia democrática, sobre todo a nivel local, y puestas en funcionamiento por algunos Ayuntamientos democráticos Servicios Municipales en los que había integrados psicólogos (Getafe, Fuenlabrada, Leganés, Madrid, etc.) el Colegio de Psicólogos, elabora, a través de la Comisión de Psicología Clínica, y a petición del Ayuntamiento de Madrid, un primer borrador como propuesta de temario para oposiciones a los Centros de Promoción de Salud de Madrid.
Paralelamente, en Enero de 1981, se constituye formalmente la Comisión de Psicología Clínica que se divide en 4 subcomisiones encargándose la Subcomisión de Reforma Sanitaria del trabajo relacionado con los Centros Municipales de Salud.
Al mismo tiempo la Comisión de Psicología Escolar empieza a funcionar constituyéndose igualmente varias subcomisiones, una de las cuales adopta el nombre de Subcomisión de Psicología y Municipios y empieza a estar formada por profesionales que trabajan en Servicios Psicopedagógicos Municipales.
Nos encontramos así con que a finales de Febrero del 81 en el Colegio de Psicólogos de Madrid están funcionando dos Subcomisiones (Reforma Sanitaria y Psicología y Municipios) cuyo campo de trabajo, en algún aspecto, es el mismo. Por ello se inicia un proceso de reuniones para unificar criterios; a propuesta de la Subcomisión de Psicología y Municipios se decide realizar conjuntamente unas Jornadas de Trabajo sobre Psicología y Municipios en Junio de 1981.