Papeles del Psicólogo es una revista científico-profesional, cuyo objetivo es publicar revisiones, meta-análisis, soluciones, descubrimientos, guías, experiencias y métodos de utilidad para abordar problemas y cuestiones que surgen en la práctica profesional de cualquier área de la Psicología. Se ofrece también como foro para contrastar opiniones y fomentar el debate sobre enfoques o cuestiones que suscitan controversia.
Papeles del Psicólogo, 1993. Vol. (57).
Antonio García Moreno.
En la España del 93 se echaba de menos una ventana profesional a la Europa de la CE y del EEE en lo referente a la aplicación de la Psicología al mundo laboral, tan en crisis y cambio actualmente.
Este espacio europeo ya lo habían empezado a cubrir la International Association of Applied Psychology (IAAP), la International Union of Psychology (IUPsyS) así como la European Network of Organizational Psychology (ENOP).
La breve y fecunda historia de la EAWOP se inicia en el 83 en el Congreso de Nijmagen (Holanda) tras el que se han realizado otros cinco a razón bianual: en el 85 en Aachen, en el 87 en Antwerpen, en el 89 en Cambridge, en el 91 en Roven y en el 93 en Alicante. Como se puede observar, estos pequeños congresos europeos, monotemáticos, tratan de no coincidir con los grandes congresos internacionales y multitemáticos para posibilitar así la compatibilidad entre lo europeo y lo mundial, entre lo concerniente al Trabajo y las Organizaciones y las restantes aplicaciones y especialidades de la Psicología.
La iniciativa surgió de Holanda quien empezó con pequeños congresos bilaterales con Alemania primero, y luego con el Reino Unido. En ellos trataban de intercambiar conocimientos experiencias y cooperación internacional. De esos encuentros de sólo 200 profesionales de únicamente dos países se fue ampliando tanto el número de países como de congresistas, apoyándose en las asociaciones profesionales de cada país. Actualmente la EAWOP está constituida por 15 asociaciones de nueve países europeos: tres de Holanda, tres de Francia, dos de Alemania, dos de Italia y uno de Bélgica, Reino Unido, España (COP), Suiza y Hungría. Han solicitado su ingreso otros países: Austria, Dinamarca, Grecia, Irlanda, Portugal y Suecia.
De los procesos de trabajo y de los resultados es de lo que voy a tratar de reseñar sobre este reciente Congreso en Alicante.
Procesos
Formalmente fue un éxito: El horario fue muy relajado, con sesiones de 1 1/2 horas, período en el que se daban, en aulas bien señalizadas tres ponencias con sólo veinte minutos de explicación apoyada por la logística adecuada y con diez minutos de debate y diálogo que se podía prolongar con la media hora de pausa en el café.
Las lecciones magistrales, sólo una por día, eran con traducción simultánea en el Salón de Actos con lo que había opción de mantener contactos y diálogos con ponentes interesantes o de acudir al Salón de Actos a escuchar temas interesantes y a hacer una pausa en el esfuerzo del inglés, esfuerzos que compartíamos con algunos franceses e italianos.
Si bien el horario de las comidas (en la «Mensa» de la Universidad) era muy europeo, se compensó con el de las cenas y postcenas que fue muy español y en entornos muy agradables en la ciudad.
La disponibilidad y accesibilidad de la secretaría del Congreso fue total; información de todo tipo de todos los idiomas, distribuciones de avisos, reseñas y listados de direcciones, medios de transportes, estaban la mano con toda la amabilidad propia del Mediterráneo, Solo se echó en falta la disponibilidad de algunos originales de ponencias que se podían fotocopiar en el servicio de copias. Pero suplió con creces la entrega inicial del material con un libro con los abstracts de todas las comunicaciones. Nunca se estaba a ciegas sobre a qué, cuándo y dónde ir.
Las actividades sociales nocturnas estaban bien enmarcadas, suficientemente avitualladas y magníficamente acompañadas y ambientadas.
Todo creaba un clima facilitador de los encuentros e intercambios.
Resultados
En contenido sin duda la nota es sobresaliente.
La aportación española consistió en unas 50 Ponencias en las sesiones temáticas, 14 posters, cuatro talleres, cinco simposios, además de su brillante actuación en la demostración, role playing del que luego hablaremos.
El índice de suspensión de sesiones fue muy bajo y se puede indicar que el intercambio de tarjetas y direcciones tras las ponencias, fue muy alto así como la petición de copias.
La relación coste/calidad sin duda fue buena, si bien sobre coste/beneficio las valoraciones personales contrarias son respetables, pues por el coste de desplazamiento, estancia e inscripción, se podrían haber comprado un buen número de libros. Sin embargo, los libros, aunque te esperan y hablan pausado y con rigor, no te escuchan ni contestan. A los libros se les tienen, a los colegas se les encuentra y es ese coste de oportunidad el que marca la diferencia.
Valoración
Y digo esto, porque en la actual convulsa Europa uno no sabe si suceden y necesitan cosas similares a las de aquí. Con la CE desde el 93 el libre acceso en empresas extranjeras aquí o fuera de aquí será cada vez mas real.
La impresión es que pese a que las economías mas poderosas usan más psicólogos que aquí (como en Alemania donde los 3.000 psicólogos del Trabajo no constituyen en absoluto ningún impedimento para encontrar trabajo inmediatamente al nuevo titulado cuando acabe su carrera). Sin embargo, los temas y funciones como cabía esperar son los mismos y las demandas ante los nuevos problemas muy similares.
Siguen con auge las demandas y experiencias de formación, tecnología de información y selección y orientación ante el paro (sistemas de entrada y salida laboral).
A su vez se observan temas nuevos como los de Salud Laboral con temas tan actuales como stress, y absentismo laboral. El significado del trabajo según los valores y el estado del bienestar son temas que no vienen en los libros, tan frecuente y actualmente como se pudiera prever que se demandaran.
En la valoración de este Congreso hay que reseñar dos puntos muy positivos: la conferencia del presidente del Tribunal Constitucional, profesor Ruiz Chica y el Role Playing dirigido por José María Peiró, I Martín y D. Buynes.
«La intervención no vinculante de los terceros en la solución de los conflictos laborales» fue una conferencia refrescante y alentadora para seguir abriendo caminos y aplicaciones de la Psicología a las necesidades de nuestros tiempos. En ella se resalta el nuevo papel del mediador que se va requiriendo en las grandes empresas para ofrecer ante los conflictos alternativas eficaces pero diferentes a los legalistas. En la opinión del experimentado y autorizado ponente, los conflictos laborales no deben ser desde el primer momento judicializados salvo en última instancia, agotadas otras vías. Y eso en base a que la misma judicalización y enfoque legalista no hace más que enconar las posturas de las partes en litigio para cuyos puntos de encuentro y aproximaciones, la solución de ayuda viene más que del derecho y su tinte autoritario, de la Psicología y sus estrategias y técnicas de afrontamientos, análisis, diseño y propuesta de soluciones, su mensaje fue una dura y consistente invitación a la colaboración de los psicólogos en los recursos de mediación y arbitraje en los conflictos laborales. Es más a una pregunta sobre la posible pertinencia de contar en el CES con psicólogos la contestación fue positiva así como para las AAPP.
El segundo punto de interés relevante que deseo comentar es el de la demostración de un Role Playing en que una empresa multinacional proyecta implantar en la CE, dentro del sector del automóvil, unas factorías para lo que demanda un dictamen de expertos que mediante negociaciones y consenso decidían, según los intereses de la empresa, en que cuatro países de los cinco preseleccionados deberán implantar tales factorías y crear 8.000 puestos de trabajo ¡tema candente!
Las cuatro nuevas factorías a implantar en no más de cuatro países eran éstas:
Motores. Caja de cambios. De montaje. De chapa y pintura.
Los países candidatos de la CE eran: Reino Unido, Holanda, Francia, Italia y España.
Los seis criterios a manejar para ver la idoneidad objetiva de cada país para una o varias factorías eran éstos:
1. Legislación medioambiental no muy exigente ni incompatible en cuanto a vertido de residuos ....
2. Apoyos e incentivos fiscales gubernamentales.
3. Costes salariales.
4. Cualificación de la mano de obra disponible.
5. Industrias subsidiarias, implantados previamente respecto a este sector.
6. Infraestructura de transportes y comunicaciones.
Obviamente cabía esperar conflictos por el sesgo nacionalista de los técnicos de los diferentes países candidatos que deberían de tomar la decisión con el riesgo de dañar los intereses de la empresa o los de la Nación de la que provenían, privándola de una importante inversión, además de miles de puestos de trabajo y del prestigio que supone el ser elegido. Los técnicos deberían llegar mediante negociaciones con tiempo limitado a una conclusión concertada y razonada en cuanto a la defensa de los intereses de su empresa. Para salvar esta escisión de fidelidades y tomar decisiones, los dos representantes de cada uno de los cinco países sentados a negociar y decidir, podían evacuar consultas, hacer pausas y obtener información de equipos de apoyo que los constituíamos libremente el público asistente en número de entre cinco y ocho.
El trabajo negociador se mostró realmente excitante y conflictivo, viéndose los diferentes talantes y estrategias de resolución de problemas y el trabajo en equipo. La decisión se tomó recurriendo a métodos cuantitativos y cualitativos. Se analizaban pros y contras de cada país, para cada factoría en cada uno de los 6 criterios. A estas valoraciones se les daban puntualizaciones medias obtenidas por la asignación mutua de todos y cada uno de los «países» a los restantes. Se realizaban algunas correlaciones y con sus resultados se llegó a una decisión.
Para bien o para mal de nuestro país nuestros negociadores tuvieron habilidad suficiente para encontrar argumentos basados en datos, para conseguir que se nos asignase una factoría.
Italia, poco asertiva, dubitativa y con demoras y falta de alianzas adecuadas se quedó sin nada.
Pese a que los bajos costes salariales y nuestra pobre exigencia medioambiental fueron factores de peso la red de comunicaciones, la cualificación de la mano de obra, los apoyos gubernamentales y la infraestructura de industrias subsidiarias para lograr la adjudicación, no se puede negar que nuestros colegas estuvieron «enormes». Compitieron magníficamente, y ampliaron su cuota de participación en el mercado ... ¿No es eso de lo que se trata hoy día ...?
Nota a tomar por nuestros empresarios. Italia, igual o mejor que nosotros no supo negociar.
En su saber y entender, informa de lo que vio y escuchó.